El análisis del tiempo de discurso, las palabras más usadas, los principales ejes temáticos, las frases destacadas y la comparación con los discursos de los expresidentes desde la vuelta a la democracia.
Orsi destacó la importancia de celebrar la recuperación de la democracia en Uruguay hace 40 años. Resaltó la importancia de mantener el compromiso con la libertad, la verdad y la justicia. El flamante presidente agradeció a los partidos políticos por hacer de Uruguay una amalgama plural de convivencia y a los expresidentes por sostener y alimentar la reconstrucción democrática durante cuatro décadas. Agregó que la democracia gozará de una mejor salud el día en que todas las familias uruguayas sepan dónde están sus familiares desaparecidos.
Orsi enfatizó la necesidad de reconstruir una matriz de protección social que históricamente ha distinguido a Uruguay. Citó a Carlos Real de Azúa, quien describió a Uruguay como una “sociedad amortiguadora” cuya cohesión se basaba en el acceso generalizado a la educación, la salud, la vivienda y el trabajo. Reconoció que, aunque los tiempos actuales presentan tramas sociales más complejas, no se debe renunciar a ciertos paradigmas. El presidente destacó la importancia de combatir la pobreza infantil, calificándola como una afrenta dolorosa para la sociedad. Afirmó que un país que no cuida a sus niños no se cuida a sí mismo y considera inadmisible que un país de renta alta como Uruguay tenga una alta proporción de niños y adolescentes viviendo en la pobreza. Orsi relacionó la pobreza infantil con la pobreza adulta y se comprometió a garantizar el sustento de las familias con menores a cargo, especialmente las mujeres jefas de hogar.
Destacó la urgencia de atender los problemas de salud mental que afectan a la población de manera transversal e intergeneracional. Propone un abordaje integral desde diversas ópticas: social, sanitaria, cultural y comunitaria.
Orsi expresó su visión sobre la libertad, contrastándola con un concepto “ultra individualista” que favorece al más fuerte. Definió la libertad individual como clave para la convivencia e igualdad de oportunidades. Cuestionó cuánta libertad puede ejercer alguien con problemas de salud, vivienda o trabajo, o las mujeres que sufren violencia. Advirtió sobre el error de sacrificar la libertad en aras de una supuesta igualdad y propone un gobierno caracterizado por el principio de humanidad.
El presidente destacó el rol de Uruguay en el mundo por su vocación de paz y su incansable búsqueda de la solución pacífica de los conflictos. Expresó el deseo de sumar esfuerzos para contribuir con la estabilidad y la paz en un mundo cada vez más complejo y cambiante. Afirmó que una de las principales responsabilidades es que la región siga siendo un continente de paz, con mayor estabilidad, equilibrio social y económico, y con un mejor proceso de integración. Destacó el avance de las acciones y acuerdos del Mercosur, el reforzamiento de la CELAC, la participación activa en la OEA, la profundización de la cooperación Sur-Sur, y la multiplicación de los acuerdos con los grandes países de referencia en forma bilateral y multilateral.
Llego también con las enseñanzas de los queridos Marcos Carámbula, Tabaré Vázquez y José Mujica.
Corresponde también agradecer a los expresidentes aquí presentes: Julio María Sanguinetti, Luis Lacalle Herrera y José Mujica; y corresponde también agradecer a quienes desgraciadamente ya no están entre nosotros: Jorge Batlle y Tabaré Vázquez; y al presidente saliente, Luis Lacalle Pou, a todos ellos, por sostener y alimentar esta reconstrucción democrática de manera ininterrumpida durante cuatro décadas.
Sobrevuela un concepto de libertad ultra individualista que predica el predominio del más fuerte. Nunca será esta nuestra noción de libertad.
Ya la historia comprobó el error (u horror) de sacrificar la libertad en aras de una supuesta igualdad. No incurramos en la falacia contraria.
La democracia goza de buena salud también cuando sus gobernantes son trabajadores incansables y nunca pierden de vista por qué y para qué están donde están, es decir, para mejorar la vida de los orientales.
La democracia gozará de una mejor salud el día en que todas las familias uruguayas sepan dónde están sus familiares desaparecidos.